lunes, 15 de diciembre de 2014

CRÓNICA OSASUNA - REAL VALLADOLID (2-1)

BOFETADA A FUENTEOVEJUNA


Por todos es conocido el cántico futbolístico de "todos a una, que... Osasuna". Pues bien, el Real Valladolid eligió Pamplona para mostrar su repulsa ante esas proclamas. Fue durante la segunda parte del choque ante los rojillos, en la que los pucelanos decidieron menospreciar el "todos a una", haciendo cada uno la guerra por su cuenta. Si los habitantes de Fuenteovejuna nos viesen...

Bromas aparte, el Pucela volvió a defraudar a sus aficionados con otro lamentable partido fuera de Zorrilla. Tras una buena primera parte en la que nos fuimos al descanso con un injusto 2-1, el juego desarrollado hacía albergar esperanzas de victoria. Y más cuando el árbitro (que se equivocó en todas las decisiones polémicas del partido) expulsó a Flaño por doble amarilla. 40 minutos por delante para dar la vuelta al marcador ante un Osasuna hundido en la tabla, diezmado por las bajas y con un jugador menos. Pero curiosamente fue cuando menos sufrió.

Rubi volvía a apostar en Pamplona por los "correcaminos" en banda y Jeffren en punta, refrendando su idea de encontrar un 11 ideal. Quedó claro que ese no era. Con Bergdich y Jeffren fuera de posición, la única alternativa clara en ataque eran las internadas de Mojica. Una y otra vez los blanquivioletas buscaban al colombiano, como en aquel capítulo de El príncipe de Bel-air en el que la proclama era: "balones a Will". Más allá de eso, nada. Ningún tipo de coordinación en ataque, lo que hacía que no se generaran ocasiones de gol.

Más allá de la lesión de Roger y la ausencia de un sustituto de garantías, parece que en los últimos partidos el mal del Pucela se extiende hacia atrás, ya que ahora no se generan apenas ocasiones, y cada vez nos encontramos con más errores defensivos. A Óscar, nuestro adalid en ataque, se le ve incómodo. Los compañeros de batalla que le ha buscado Rubi no son sus anhelados Guerra, Nauzet o Bueno. El entrenador catalán debe tener claro qué tipo de juego quiere para el Pucela y elegir a sus jugadores. O bien, con los jugadores que tiene disponibles, adaptar el estilo de juego. Y no este batiburrillo que cada vez tiene menos sentido y se muestra menos eficaz.

Dicho esto, creo que Rubi ha demostrado durante las primeras jornadas una capacidad de sacar provecho a una plantilla corta utilizando múltiples variantes, por lo que confío que pueda dar de nuevo con la tecla. Eso sí, debe querer cambiar y para ello es necesario que asuma los errores, y de la rueda de prensa de Pamplona no se desprende mucha autocrítica.

Y más allá de Rubi, los propios jugadores deben dejar de hacer la guerra por su cuenta. Hay calidad suficiente para llevar el balón hasta la portería contraria, como se vio durante la primera parte de Pamplona. De cara al partido del domingo pido tranquilidad al abonado, ya que es necesario que nos mostremos "todos a una", y que esas ganas de protesta no aparezcan, si tienen que aparecer, hasta el pitido final. A Rubi le pido que haga algo, el turrón está cerca.




Valoraciones individuales:

- Javi Varas: Poco pudo hacer en los goles y pocas intervenciones el resto del partido.
Chica: Buena primera parte como todos, luego se diluyo en el caos.
Samuel: Rueda, te echamos de menos.
Marc Valiente: El enésimo gol en propia puerta. 
Peña: Esta vez se incorporó menos. En su línea.
Leão: Gran primera parte. Horrible segunda. 
Álvaro Rubio: Al igual que Leão cuajó una buena primera parte En la segunda perdió todos los balones del mundo.
Bergdich: Lost en la derecha.
Óscar: Gol y desesperación.
Mojica: Balones a Mojica.
Jeffren: ¿Cuántas oportunidades más?.
Óscar Díaz: Tuvo una muy clara. Para mi debe ser el 9.
Jorge Hernández: Salió cuando peor estábamos.
Omar: Prácticamente ni se le vio.


Por @AlbertoSelby

No hay comentarios:

Publicar un comentario